NUEVA YORK, Estados Unidos.- La presidenta brasileña Dilma Rousseff afirmó que la crisis mundial amenaza al mundo con una grave ruptura. Lo hizo al abrir el debate de la 66ª Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, con lo que se convirtió en la primera mujer de la historia en inaugurar las sesiones del organismo internacional.

La crisis económica puede acarrear una grave ruptura política y social, señaló Rousseff, y agregó que el mundo se encuentra en una situación extremadamente delicada y ante una gran oportunidad histórica: "O nos unimos todos y salimos vencedores, o salimos todos derrotados", continuó. Además, remarcó que que ya no interesa buscar responsables a la crisis, sino que lo importante es encontrar soluciones colectivas.

"Por primera vez en la historia de las Naciones Unidas una voz femenina inaugura el debate general, es la voz de la democracia y de la igualdad", dijo Rousseff. "Tengo la certeza de que este será el siglo de las mujeres", confirmó.

"Nuestra capacidad de aguantar la crisis no es ilimitada. Necesitamos muestras de coherencia y coordinación", dijo aludiendo a los mandatarios de los países desarrollados. LA GACETA ©